Sin los estándares de Dios, puede ocurrir cualquier cosa. El mundo observa como Hollywood presenta lo bueno como malo, la moralidad como un aburrimiento, y lo malo como delicioso. Las tres principales estocadas que vimos en educación: el engaño de la religión, el engaño de los valores, y el engaño de un sistema mundial, iluminan las pantallas cinematográficas a través de nuestra nación.
· Primero, un nuevo sistema religioso está reemplazando al cristianismo (en los que profesan creer en Cristo): fundamentalmente es una mezcla de humanismo, hedonismo, hinduismo y ocultismo.
· Segundo, no se pueden perder los valores del engaño. Violencia, inmoralidad, blasfemias y desorden (mentira, burlas, irrespeto hacia la autoridad) son principios comunes, aun en las películas para niños. Por ejemplo: ¿Quien engaño a Roger Rabit?, que pudo haber sido una película para deleite de toda la familia, se echó a perder con humor sexista, violencia sádica y comentarios vulgares.
· Tercero, la visión globalista de un mundo transformado toma diversas formas. El hombre maneja fuerzas síquicas, corre a través del tiempo, rompe las fronteras de la muerte, y se conecta con extraterrestres evolucionados. Lo imposible se hace realidad; porque nada es imposible para la imaginación. Field of Dreams [La tierra de los sueños], Viaje a las estrellas y Cazafantasmas, todas muestran poderes trascendentes que avergüenzan a la vida real.
El cuadro en este capítulo revela los propósitos escondidos detrás de mensajes inmorales y visiones ocultas: la reforma social. Hollywood, como el sistema educacional y la élite de los medios de comunicación, ha captado la visión de Satanás: Absolver a la gente que se vuelve contra Dios, y justificar un seductor estilo de vida de placer sensual, muerte espiritual, y disposición para una nueva clase de mundo permisivo.
Berit Kjos
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